Poco se coincidencias extrañas, poco me importa que la historia se demuestre caprichosa y cíclica; aun menos entiendo de campañas televisivas y de creación de esperanzas fraudulentas, no me siento un tahúr vendiendo tónicos para la calvicie a ancianos crédulos, no compro aquello que no puedo ver, ni creo en aquello que no se pude palpar, jamás hubiera transitado el Yukon en busca de oro ni aunque me lo hubiera garantizado el mismísimo Jack London, poco se de quimeras, utopías, no tengo un sueño intangible, ni una meta lejana; yo vivo el día, paso a paso o piano a piano, mi meta es la mitad de la mitad del camino y una vez allí la otra mitad de la mitad que quede para alcanzar a Aquiles. Segui leyendo la nota acá.
21.4.10
Certeza
Tempus fugit, sicut nubes, quasi naves, velut umbra» *
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario