
Silenciosas las olas golpean la cubierta,
tan furiosas como ignoradas
Zarpazos de un Dios ausente arremeten la embarcacion.
Envidiosas.
Como niños caprichosos vuelven una y otra vez en busca de lo
prohibido
Incasansablemente locas,
ignoradas.
Todo lo que en verdad conocemos
1 comentario:
Pero, tienen una causa justa???
Publicar un comentario